Puede ser que en ocasiones debido a situaciones de la vida cotidiana sucede que por más horas que durmamos, no logramos descansar; sin embargo, te has dado cuenta que esto es más frecuente cada vez, generando dificultades para concentrarse, te vuelves más propenso a estar tenso/a durante el día, te enojas con facilidad.

​

* En ocasiones se dificulta conciliar el sueño; tomas tu celular o ves algo en la tv para distraerte y lograr dormir.

​

* Tal vez ocurre que despiertes antes de la hora programada, generando dificultad de levantarse, como si la cama te abrazara, el cuerpo se hace pesado hasta que continúas durmiendo por más horas sin hacer algo productivo, o cumplir con las responsabilidades.

​

* Al día siguiente que aparentemente dormiste sientes un dolor de cabeza durante el día; En ocasiones has sentido presión en el pecho, como si fuera a darte un infarto o alguna sensación de ahogamiento.

​

* Hay veces que tienes algún problema del estómago como gastritis, dolores o retortijones, o bien, rasqueras constantes (piel, cabello, etc.) y que a pesar de todos los medicamentos y tratamientos simplemente pareciera no terminar.

​

* Sientes que eres una carga para las personas cercanas a ti, y en algunas ocasiones te limitas a hablar de ello.

​

Muy dentro de ti sabes que necesitas hacer algo ahora para no perder el control de tu vida.